martes, 7 de enero de 2014

Aún sigo transitando tus veredas San Miguel




SAN MIGUEL DE PALLAQUES: UN ENCUENTRO DE POETAS Y ESCRITORES CON SABOR A ETERNIDAD

Por: César Mejía Lozano

Hasta ahora estoy deleitándome de la grandeza de un pueblo noble y generoso como San Miguel de Pallaques. Hasta ahora estoy disfrutando de su gente sencilla, de su identidad cultural, de sus artistas. Me imagino, maravillado, caminando por sus calles pintorescas, entre casas de adobe, adornados de largos balcones de caoba y techos entejados. Me veo en las cuatro esquinas de la Plaza de Armas contemplando el paso de las mozas pisadiablos y las artesanas sanmiguelinas, manos mágicas, tejedoras de sueños. Créanme, aún estoy contemplando su extraordinaria Iglesia de una sola torre y su puente de calicanto. Han pasado ya dos semanas del encuentro y mis ojos siguen transitando la ruta aprendida, del hotel Casa Blanca al Municipio, del Municipio al Portón, del Portón al Teatro, del Teatro a la Plaza de Armas, del poeta de Acunta al músico Bobachón, de mis versos a los cuadros de Burgos, de mis nostalgias a las sonrisas de los niños, de mi gratitud por Walter y Ana María a los cálidos abrazos del maestro Antonio Goicochea y Víctor Hugo Alvitez (Organizadores del evento). Aún sigo transitando tus veredas San Miguel.
Si un encuentro de poetas, escritores y artistas te mueve y conmueve, te emociona y te eleva a las montañas, sin duda, es un encuentro con sabor a eternidad. Y éste lo fue.
¡Oh, maestro Demetrio Quiroz Malca!, hemos estado tan cerca de usted y de su palabra, hemos sentido su aliento y su pensamiento, hemos regresado a nuestros pueblos cargados de vuestra energía para reiniciar la marcha en pos de una real reivindicación del poeta provinciano.
En mi quipe de recuerdos hay una niña, en primera fila, que aun escucha las historias del abuelo. Y en mi corazón de poeta bambamarquino, solo hay gratitud para un pueblo que se portó a la altura de un encuentro de poetas, escritores y artistas que marca ya historia en la cultura cajamarquina por el nivel de los participantes y por el desborde de calidad y calidez de su gente.